En medio del desierto al noreste de África, específicamente en el valle del río Nilo, surgió Egipto, una de las civilizaciones más importantes, ya que dejó grandes obras arquitectónicas.
Los egipcios se adelantaron a muchas actividades de hoy en día, como lo son el arte, la astronomía y la agricultura.
Los egipcios se adelantaron a muchas actividades de hoy en día, como lo son el arte, la astronomía y la agricultura.
Los egipcios vivían de la agricultura, por la fertilidad del Nilo, los cultivos eran abundantes e incluían lino, trigo y cebada. Con estos dos últimos productos hacían pan y cerveza. También se alimentaban de hortalizas y frutas. El ganado servía par calcular al riqueza de una persona y la cantidad de impuestos que debía pagar.
Se agruparon en dos reinos: Alto Egipto y Bajo Egipto, con el fin de aprovechar mejor las bondades que brindaba el río Nilo. Este periodo es conocido como Predinástico.
En Egipto, las dinastías se iniciaron a fines del cuarto milenio, cuando el rey Menes, del Alto Egipto, conquistó el norte y unió los dos reinos, fijando como capital a Menfis. Así se formó el primer Estado de la historia de la humanidad.
Egipto fue gobernado por 27 dinastías, hasta que los asirios conquistaron a Egipto. Las dos primeras dinastías son llamadas tinitas, por el nombre de su capital, Tinis, y llevaron al pueblo egipcio a un periodo de gran prosperidad económica.
En la Tercera dinastía, destacó el rey Zoser, quien comenzó a construir las pirámides como tumbas reales; en la dinastía XVII, el rey de Egipto comenzó a llamarse faraón, que significa “gran casa” o “lugar del templo”, porque originariamente se refería al palacio y no al morador principal, pero por costumbre se llama faraones a los reyes de Egipto desde las primeras dinastías.
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